Cada cuerpo es único, y por eso los resultados pueden variar. Hay personas que empiezan a notar cambios en pocos días, como más energía o menos inflamación, y otras tardan un poco más, especialmente si hay condiciones como resistencia a la insulina, estrés crónico o desbalances hormonales.
Lo importante es que cuando se sigue el plan que diseño de forma personalizada —ya sea para bajar de peso, controlar la glucosa o reducir la inflamación— los resultados llegan. Pero no es magia: depende de tu compromiso, tu constancia y de que sigamos evaluando tu progreso juntos.